Lo que dicta la razón cuando se vive una dolorosa derrota en cualquier circunstancia es marcharse, pero en demasiadas ocasiones el orgullo la eclipsa y la decisión es la de continuar. Algo parecido ocurre con De Bernardo si bien carga en sus espaldas con otras cuestiones a tener en cuenta. Uno puede pensar que lo lógico es que se vaya y deje a su partido que haga y deshaga según un nuevo líder. Pero hay un problema de base y es que si se va ya no puede controlar la información municipal en torno al desfalco. Ojo que aquí no voy a cuestionar si tiene las manos limpias o si es responsable político, tan solo a cavilar las contra-indicaciones que tiene su marcha. Si se va está claro que ha sido vencido por el desfalco y la gente identificará lo que ha pasado con su persona y lo señalarán a él como principal responsable del mayor robo en San Fernando. Es posible que su grupo deje que está idea cale en los ciudadanos ya que limpiaría su imagen cargando toda la culpa de lo ocurrido en De Bernardo.
Por otro lado si no está en el Gobierno no puede controlar los flujos de información ni evitar que los dedos le señalen a él. No es lo mismo decir han robado en Hacienda que ha robado Pepito Grillo en hacienda, la investigación será totalmente distinta. Pues él teme que ocurra lo mismo. No es lo mismo decir que se firmaron papeles donde se evidenciaba el desfalco a De Bernardo firmó estos papeles donde se recogen las cifras del desfalco.
Está claro y es evidente De Bernardo corre el peligro de convertirse en una cabeza de turco y la única posibilidad de impedirlo es seguir al frente del partido y tocar gobierno para controlar la información, porque no es lo mismo a que primero te lo tengan que decir a la cara, a que lo digan al público sin tener que pasar por ti y sin verte la cara al otro día de manera forzada.
No hay comentarios:
Publicar un comentario