Un Tranvía llamado... incertidumbre

Esta vez me mojo y digo que para mí el tranvía puede ser bueno para San Fernando y creo en sus posibilidades. Ahora, como me gusta ser defensor de las causas perdidas, me alegro enormemente que Joaquín Moreno se convierta en el David moderno y tumbe por lo judicial el proyecto, cuando solo recibió amenazas. Yo vi como les colocaron a los expropiados las vallas sin avisar en las puertas de su casa, como les abrieron las calles reventando tuberías y entrando agua en sus domicilios. Como comenzaron a tirar edificios cuando no se había certificado todas las expropiaciones. A todos aquellos que tienen la boca grande y son tan necios para decir que estas personas representan el inmovilismo de la ciudad, más vale que piensen en qué harían si les pasara, ¿entregar sus llaves? Yo creo que no.

Ahora lo que surge es la incertidumbre de saber si se acabará la obra o se paralizan antes los trabajos, qué pasa con el puente de la variante y cuándo llegarán las pruebas de paso del tranvía que se esperaba para septiembre. Habrá que esperar a ver qué pasa.